Como el tiempo hace quedar mal a los analistas y la prensa son de las mejores cosas para observar. Que mucho se han equivocado todos esos medios con la figura de James Harden. Atacado y menospreciado por su supuesta mala defensa, que en fin sí era mala, pero su juego siempre en general hablaba por él.

Es que James Harden es la mezcla de puntería, técnica y visión juntas. El junte con Mike D'Antoni potenció sus dotes de súper estrella. A tal nivel que está haciendo una de las mejores temporadas individuales de toda la historia. Números estratosféricos ; 28.8 ppj, 8.1 rpj y 11.3 (líder NBA). Aunque esto tiene secuela antigua, porque Harden siempre fue un súper dotado, pero su nuevo dirigente D'Antoni, le mostró cuan efectivo puede ser si involucra en ataque a sus compañeros. Y eso deriva en ser el líder en asistencias de la NBA. De escolta a base, un cambio que es más que difícil y ni siquiera hay muchos que lo hacen. Porque James, siempre fue determinante y aunque ya ha logrado llegar a finales de conferencia y de NBA, tenía que seguir demostrando su impacto al colectivo como líder.

Pues ahí está su currículum. Los Rockets de su mano, se han convertido en contendores al título. Sí, son una realidad y un peligro latente estos Rockets y eso no es una casualidad, es un diseño y una visión que tuvo Mike D'Antoni y James Harden la ejecutó con brillantez. No es cualquier cosa lo de este equipo, que juega bien, que tiene armas, que anotan el triple consistentemente y que Harden no solo crea, sino que cierra de manera increíble los partidos. La élite le sonríe nuevamente a Harden y de ahí no saldrá por muchísimo tiempo.