Rusney Castillo está de nuevo en las Grandes Ligas, aunque pudiese tratarse de una estadía muy breve.

El jardinero cubano está arriba con los Red Sox, por primera vez este año, esto luego de la baja temporera por licencia de paternidad del estelar Center Fielder, Jackie Bradley, lo que implica una ausencia de tres días.

Ya veremos si en esta breve ventana Castillo recibe la oportunidad, y, de recibirla, la aprovecha. De hecho, esta, su primera noche con los Red Sox, vio el juego en el banco. Chris Young ocupó el Jardín Central en el lineup de hoy en Baltimore.

Los MEDIAS ROJAS ganaron este juego 6-2 a los Orioles, con exitoso debut del pitcher venezolano, Eduardo Rodríguez, y tres cuadrangulares del 1er bate, Mookie Betts. Los cuadrangulares de Mookie fueron hacia los tres jardines, en la 1ra, 2da y en la 7ma entrada. Empujó 5 carreras y aumentó a 12 su producción de jonrones, nada mal para un primer bate.

Por su parte, el venezolano Rodríguez, quien viene de recuperarse de una lesión en una rodilla, se estrenó hoy con una salida de calidad: 6 IP / 6 H / 2 ER / 0 BB / 3 K / 89 lanzamientos, 61 strikes.

En AAA (Pawtucket) los números de Rusney no entusiasman a nadie. Batea .241, se embasa para .302, y su slugging no intimida, a penas .317. En 37 partidos tiene un sólo cuadrangular.

Del cubano se espera mucho más, considerando que Boston invirtió en él sobre $70 millones en 2014. Luego de haber venido a jugar con los Criollos de Caguas por segundo invierno seguido, se esperaba que ya este verano fuese uno de los tres outfielders regulares de los Red Sox, junto a Bradley y Betts. Sin embargo, tras un pésimo Spring Training, el LF se lo han compartido entre Brock Holt, Young y últimamente, Blake Swithar, un catcher convertido en patrullero.