Los equipos que se han enfrentado en las pasadas dos series finales, se medirán en la serie de cuartos de final. Y aunque es sumamente emocionante ver otro enfrentamiento entre estos dos equipos, es una lástima que uno de ellos no pasará a la semifinal.

Los Leones entran a esta serie con mucha confianza, no solo porque tienen a los Capitanes de hijos, sino porque en la última parte de la serie regular dieron muestras de cuán poderosos pueden ser, con dos refuerzos poderosos, un Vasallo tirando uno de sus mejores torneos, y un Carlos Rivera armando a la perfección el ataque ponceño, sin contar el gran crecimiento de Carlos Emory, especialmente en defensa.

En cuanto a los Capitanes, resbalaron en las últimas semanas del torneo, antes de reponerse y lograr culminar en tercera posicion. Los Capitanes habían adicionado a nuevos refuerzos en Coty Clarke y Cady Lalanne, así como a los bases Dennis Clemente y Walter Hodge, quien junto a David Huertas, Renaldo Balkman y Joel Jones hacen de los Capitanes un poderoso equipo, al menos en el papel. Súmele a ese trabuco al nuevo refuerzo, Davon Jefferson, un jugador que viene con buenas credenciales de la liga de Rusia.

El factor cancha local no le ha servido de mucho a Arecibo en pasadas ediciones. Pero claro, en aquéllos años Mike Harris estaba en Ponce. Devin Ebanks no es Mike Harris, pero es un faximil razonable. El poder de anotación de Ponce es igual o mayor que el de Arecibo. Pero la rotación de los Capitanes es superior.

Si en algo Ponce aventaja a Arecibo es en la experiencia de su técnico Nelson Colón. Pachy Cruz fue un jugador que fue parte de muchas ediciones campeoniles, pero como jefe es distinto. Pachy tiene mucha presión, la fanaticada arecibeña es implacable.

Esta es sin duda la serie más difícil de predecir porque cualquiera de los dos equipos puede robarse un juego en la carretera. La clave va a ser cual de los dos equipos puede acoplar mejor a sus nuevos jugadores. Vemos esta serie decidiéndose en el máximo de 7 juegos, con los Capitanes ganando en ese último juego.