Nuevamente el base Derrick Rose vuelve a las portadas con el rumor de que los Knicks de Nueva York quieren traerlo mediante cambio. Es una movida agresiva bastante lógica sabiendo que estos Knicks necesitan a un base de las cualidades de Rose. Y es que Derrick no está acabado, incluso la capital del mundo podría ser el mejor escenario para que Rose retome su carrera.

Al base de la universidad de Memphis le queda muchísimo baloncesto, no está acabado, todavía puede ser muy útil para cualquier equipo que confíe en él y que le brinde juego. No esperemos que repita la temporada de jugador más valioso del 2011, pero dentro de sus condiciones aún es un gran jugador. Ciertamente en Chicago ya se acabó su era, en los los Bulls no cuentan con él y ese antiguo núcleo de buenos jugadores que comandó a Chicago por años ya caducó. Ese comando custodiado por Rose y escoltado por Joakim Noah no debe continuar en esa ciudad. La razón es obvia, el clan está roto, su nuevo dirigente no cree en ellos, la suerte fue muy dura con esos Bulls porque tenían un equipazo en su momento para al menos disputar una final de NBA. Los ciclos siempre tienen que terminar y el ciclo de Rose en Chicago acabó. Ya Derrick no tiene la motivación en esa ciudad y necesita urgentemente cambiar de atmósfera.

Un mercado grande como Nueva York es perfecto para continuar cualquier carrera, allá se unirá a Carmelo Anthony y al letón Porzingis. Todavía esos Knicks son el equipo más poderoso de la NBA en cuanto a dinero, nadie tiene más valor y jugar en Manhattan siempre es un plus. Derrick Rose no tendrá mejor opción que irse a los Knicks, demostrar que está a un gran nivel y construir junto a Carmelo un equipo contendor en el MSG.

FOTO Montaje Rose con NYK: VN Design