BASKETBALL BSN

martes, 26 de abril del 2016
El Mandy Effect
El 6 de abril del 2015 los Piratas de Quebradillas perdieron en Mayaguez lo que fue el último juego de Richie Dalmau al mando de la nave pirata. El día antes, los Piratas habían despedido a Richie, sólo para suplicarle que dirigiera nuevamente en Mayaguez. Luego de la derrota, lo sentenciaron.

Enorme sorpresa causó en el mundo del baloncesto puertorriqueño cuando Luis Armando Cancel, quien por más de 15 años había sido asistente en la dirección de experimentados técnicos como Julio Toro y Flor Meléndez, asumió la dirección técnica de los hasta entonces alicaídos Piratas.

El reto no podía ser mayor. Quebradillas, un equipo de veteranos como Elías Ayuso, Christian Dalmau y Carmelo Lee, venía de una serie de derrotas, y el body language del equipo no era el mejor. Jorge Brian Díaz, el centro de los Pirtas y la promesa de la Selección, no estaba siendo factor en el ataque ofensivo, recibiendo pocos toques de balón.

Debutó Mandy en Arecibo y de qué manera. Dominaron a sus archienemigos a domicilio, y comenzó la era de Mandy con una nota positiva. Mandy logró cambiar la actitud del equipo, los puso a confiar en ellos, controló el escopeteo desmedido de Ayuso y de Dalmau, y le empezó a llevar la bola a Jorge Brian en el poste. De ahí en adelante, los Piratas han jugado para marca de 6 y 2, y en plena lucha por ser de los mejores 4 equipos del torneo.

Pero donde realmente se hace palpable el efecto de Mandy es en los Caciques de Humacao. Mandy comenzó la temporada como asistente de Flor Meléndez. Mandy siempre ha sido reconocido por sus capacidades de scouting y de planificar estrategias defensivas. Cuando Mandy sale de Humacao, los Caciques marchaban en primer lugar y todo parecía indiciar que serían los campeones de la serie regular. Desde la salida de Mandy, los Caciques juegan para 3 y 7.

Será casualidad la buena fortuna de Quebradillas, o desgaste de los Caciques? Mandy está demostrando que es buen entrenador, y lo que necesitaba era el momento idóneo para poner a prueba sus conocimientos y liderazgo. Algunos han querido desmerecer el trabajo realizado por Cancel, por decir que tiene un súper equipo. Pero incluso los buenos equipos necesitan entrenadores que puedan controlar no solamente el talento, sino los egos, algo que sobra en la plantilla quebradillana.




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