Los acuerdos, sean verbales o escritos, obligan, moralmente y/o judicialmente, a su cumplimiento por las partes. Eso es un elemento básico de cualquier negociación. En los negocios, los acuerdos son redactados por escrito. El baloncesto, al igual que cualquier deporte profesional, es un negocio, por ende, los acuerdos de los canasteros con los equipos son por escrito. Al ser por escrito, no hay espacio para interpretaciones ni excusas.

Los apoderados del BSN quieren tener equipos con buenos jugadores, y les prometen salarios que saben no podrán cumplir. Por qué lo saben? Sencillo, porque en el BSN ningún apoderado pone de su dinero para la operación de la franquicia (ni el de Arecibo). Los apoderados dependen de las aportaciones municipales, legislativas, y lo que puedan conseguir en auspicios (con excepción del de Arecibo, que corre la operación con una de sus corporaciones). Por ende, los ingresos producto de esas partidas son inseguros, máxime como están las cosas en el gobierno y en el país.

No podemos caer en la excusa que algunos "periodistas deportivos" (relacionistas públicos) pretenden hacernos creer, de que es culpa de los canasteros porque quieren contratos de mucho dinero. Ajá, acaso si a usted le ofrecen un contrato de mucho dinero, le dice al que le hace el ofrecimiento que quiere menos? No señor, se establece un precio, se negocia, y si el que va a pagar está de acuerdo, se cierra el negocio. Eso es lo que pasa en el BSN, apoderados dando contratos ridículos a canasteros que, en muchos de los casos ni los valen. Pero de quién es la culpa?

Ahora bien, ya que firmaron un contrato por los servicios, no se supone que las partes cumplan su responsabilidad? Los canasteros cumplen cuando entran a cancha, independientemente de su desempeño. Y cual es la obligación de los apoderados? Pagar en las fechas que se acordaron (por juego, semanal, quincenal, o mensual). Cómo es posible que hayan equipos, como Humacao, que no efectúa pagos a sus jugadores desde que terminó la temporada 2016? Cómo es posible que San Germán aún le adeude dinero a Bobby Porrata, después que lo despidió? Peor aún, cómo es posible que Guayama le adeude a sus jugadores por la temporada 2015?

Y tenemos que preguntarnos, dónde está la liga en todo esto? O sea, se acabó el torneo, la Nueva Era como le llamaron este año, y aquí se olvidó todo? Donde quedan los canasteros que cumplieron su parte del acuerdo? Los apoderados no pueden venir con el argumento de que están esperando que el municipio les envíe la asignación que le prometieron, que si el auspiciador X no le ha hecho el pago, y así por el estilo. Eso, en cualquier escenario judicial, es un claro incumplimiento de contrato, y la única defensa que tiene el que incumple, es el pago, porque en los tribunales las excusas no son permitidas.

Recuerdo días antes del inicio del torneo 2016 cuando hicimos el señalamiento de que habían franquicias, como Mayagüez y Guayama, que arrastraban deudas con jugadores de la temporada 2015, que no podrían fichar refuerzos. Entonces se inventaron la idea de llegar a planes de pagos con los jugadores, y así le permitieron a todas las franquicias firmar refuerzos. Nos consta de que hay franquicias que han incumplido con esos planes de pago, y al día de hoy, no han tenido consecuencia alguna en la liga.

Y saben qué? Por eso es que los apoderados incumplen descaradamente con los jugadores, porque saben que no tendrán consecuencia alguna en la liga. Y para colmo, los jugadores no están organizados, aunque ustedes vean que de vez en cuando hacen un aguaje de reunirse.

La bola no está en la cancha de los apoderados ni de la liga, está en la de los jugadores. Es a ellos a los que les corresponde hacer valer sus derechos, nadie más los defenderá. Yo puedo seguir recordándole a todo el mundo la situación, pero hasta que ellos como organismo no tomen medidas, los apoderados les seguirán pasando el rolo. Levántense de su comodidad, demanden a los apoderados masivamente en incumplimiento de contrato y cobro de dinero, embarguen las cuentas y los bienes de los equipos, las taquillas de la próxima temporada, para que vean como aparecen los chavos.

Si no lo hacen, seguirán lamentos en las redes sociales. Y seguirán los incumplimientos, porque en las redes sociales, no hay nada que exigir.